martes, 22 de marzo de 2016

Kaboomba!

/'pasa ke ˌpasa ke ˌpasa 'pasa ke ˌpasa ke ˌpasa 'pasa ke ˌpasa ke ˌpasa 'pa | kaβ'ǔːmba/

Esta secuencia de sonidos surgió hará unos diez años a partir de una canción de Bad Boys Batucada, una banda de percusión de Melbourne que mezclaba los ritmos brasileños con hip-hop, rock australiano, reggeae y funk. Su primer álbum se llamó Bad Boys Batucada (1995) y después Kaboomba (1996). Participaron en los festivales Womad y aportaron parte de la banda sonora de Un pez llamado Wanda (1988). 
Al paso del tiempo la secuencia encontró variaciones útiles y divertidas para trabajar la agilidad articulatoria y pronunciación. Afortunadamente, ha saltado a las rutinas de entrenamiento fuera del aula, por ello os explico cómo funciona, y una secuencia para desarrollar. 

Primero:
  • Prepara los articuladores: deben funcionar ágiles y sin exceso de tensión.
  • ¡No hace falta articular exageradamente!
  • Usa voz hablada, en tu tono natural.
  • Estudia detalladamente la articulación de los sonidos, ¡sólo son 6 consonantes! 
Después:
  • Fíjate en las pausas, antes y después de /kaβǔːmba/. Practica la inspiración costal, súbita, silenciosa; el movimiento (el Samba hará que te muevas), te ayuda a inspirar sin esfuerzo y sin presiones abdominales sobre el diafragma. Hay un periodo largo, y uno corto.
  • Observa los acentos primarios y secundarios: el ritmo está en tu boca. Mejor usar el tono que la intensidad.
  • Usa la /a/ para descomprimir mandíbula, lengua, labios, velo del paladar, y descansar, especialmente en /kaβǔːmba/. Pon atención en evitar una excesiva retracción de la lengua.
  • Cambia las vocales, pero mantén la /a/ en /kaβǔːmba/: /'pese ke ˌpese ke ˌpese 'pese ke ˌpese ke ˌpese 'pese ke ˌpese ke ˌpese 'pe | kaβ'ǔːmba/ - /'poso ko ˌposo ko ˌposo 'poso ko ˌposo ko ˌposo 'poso ko ˌposo ko ˌposo 'po | kaβ'ǔːmba/ - /'pisi ki ˌpisi ki ˌpisi 'pisi ki ˌpisi ki ˌpisi 'pisi ki ˌpisi ki ˌpisi 'pi | kaβ'ǔːmba/ - /'pusu ku ˌpusu ku ˌpusu 'pusu ku ˌpusu ku ˌpusu 'pusu ku ˌpusu ku ˌpusu 'pu | kaβ'ǔːmba/. Observa los cambios en los articuladores y la voz, y cómo funcionan con cada vocal. Alterna la /a/ con el resto de vocales y, si quieres, puedes buscar la uniformidad del timbre. Presta atención a las tensiones: si la lengua o el velo del paladar se cansan en exceso, tómate un descanso antes de seguir.
  • Da relieve a cada consonante sobre el resto, pero sin exagerar [p], [s], [k]. [β], [m], [b]. Dilátala, impúlsala.
  • Continúa cambiando la /p/ por otras consonantes sucesivamente. Por ejemplo: /'masa ke ˌmasa ke ˌmasa 'masa ke ˌmasa ke ˌmasa 'masa ke ˌmasa ke ˌmasa 'ma | kaβ'ǔːmba/ Me gusta avanzar desde el exterior (labios) hasta el interior (velo): bilabiales (/m/, /b/, [β]), labiodentales (/f/), interdentales (/d/ [ð], /z/ [Ɵ]), dentales (/t/, /d/), alveolares (/n/, /l/, /r/, /rr/, /s/), palatales (/y/, /hi/, /ll/, [ʝ], [ʤ], /ch/[Ɉ], /ñ/ [ɲ]), velares (/k/, /g/ [ɡ] [ɣ], /j/ [x]).
Finalmente:
  • "Palabrarismos": combina vocales y consonantes. A medida que practiques encontrarás nuevas, divertidas, y enrevesadas posibilidades.
  • Prueba distintas dimensiones y esfuerzos al articular.
  • Introduce cambios en la voz (tono, timbres, direcciones, distancias, intenciones, animales, instrumentos, desplazamientos).
  • Descansa los articuladores (bostezos suaves, masajes).
Ten en cuenta: 
  • Mantener la voz timbrada, cómoda pero enérgica.
  • Los sonidos cambian según su posición junto a otros sonidos o el acento; habrá casos en los que tengas que adaptar o combinar. Por ejemplo, /b/ y [β]/'basa ke ˌβasa ke ˌβasa 'basa ke ˌβasa ke ˌβasa 'basa ke ˌβasa ke ˌβasa 'ba | kaβ'ǔːmba/. También es un buen ejercicio para diferenciar /d/ dental e [ð] interdental: /'dasa ke ˌðasa ke ˌðasa 'dasa ke ˌðasa ke ˌðasa 'dasa ke ˌðasa ke ˌðasa 'da | kaβ'ǔːmba/.
  • Hay combinaciones más difíciles que otras según los sonidos y articuladores implicados, o según el desplazamiento de la lengua. Descubre tus combinaciones fáciles y resistentes.
  • Mide el tiempo y el esfuerzo para no congestionar los músculos. 
  • Dominar los sonidos requiere hábito, repetición.
  • Construye máscaras con tu cara (mejor disimétricas) y cuerpo. Cada vocal o consonante te  "sugerirá" algo diferente. Mantén relativamente amplio el espacio posterior de la boca y de la faringe.
  • Siente el ritmo, baila, muévete, juega.

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